Olvidé decir, no seré rencorosa, pero hay dolores,
dolores que rozan, que parten el Alma, destrozan.
Olvidos, que cansan, que agotan. Enferma la pena.
Suerte hoy he recobrado, ese dolor, así propiciado.
Olvidé decir, que toda persona, que quiere, que ama,
es sensible a todo. Que la indiferencia, la descortesía,
son males que nunca yo, a ti, te haría. Pero sí entiendo
no puedo pedir, que sientas lo mismo, que sentí por ti.
Me tomo mi tiempo, para reaccionar, ya que al enfermar,
no tuve ni fuerzas. Mi ruta, es la vida, llena de esperanzas.
Si sueño es destino, deseos y ganas. Es querer, no herir,
Te he querido. Pero
me has herido, tal vez sin quererlo.
Olvidé decir, que siempre he tratado, llegar junto a ti,
quizás esperando, tuvieras momentos, aun ajustados,
pasara ese tiempo, mirándonos los ojos, sólo amando.
El encanto reflejara, que la distancia, jamás nos separa.
Olvidé por fin, que
soy respetuosa, también cariñosa,
la descortesía, es mala es hiriente, llegó a mi simiente.
Creí en tu tibieza, alas quebraron, mi sueño, desolado.
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