Si no tuviera en tus ojos, una ventana a la vida,
muy triste me sentiría, tu mirada es el valor.
Arista de mi deseo, deslizar suave y profundo,
que produce con
orgullo, a tu lado el palpitar.
Estarás eternamente, con sinceridad querida,
serás la compañía, que
llevaré en mi mente.
Nada ni nadie, pretenda arrancarte de mi vida,
Eres mi causa querida adherida al sentimiento.
Muchos días, tantas horas sin ti, he acongojado,
Escondida entre tus brazos imaginando presencia.
Me engañaba la conciencia, pero pedía perdón.
Tratando no sucumbir, rememorando tu amor.
Tanto amor, aunque imposible, no permite olvido,
porque los rastros vividos, son causa de la pasión.
Que estremece mis sentidos,
da valor a mi Alma,
te llama la madrugada
y siente responde tu voz.
Te amo, como nunca, años esclava de tu tiempo soy.
Un capricho se termina, una pasión desvanece, sólo
un amor como éste, vive de sueños e inmensidad,
nada más debo decir, la espera, es
pura y es real.
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